viernes, 10 de octubre de 2025

Primera noche junto al mar


He vuelto a un pequeño pueblo de la costa, un lugar que guarda una parte de mi vida. Aquí viví un tiempo, y todavía tengo buenas amistades y recuerdos que me acompañan: algunos felices, otros que me tocan el alma de una manera más suave.

Siempre me gusta volver. Hay algo especial en caminar por los mismos lugares, reconocer las calles, el olor del mar, los rostros queridos… Es como reencontrarme conmigo misma.

He venido con Coco. Ahora es de noche, y los dos estamos en la habitación del hotel: una camita para él, otra para mí, aunque, como siempre, le he traído su propia cama. El hotel es precioso, está justo al lado de la playa. Desde el balcón se escucha el mar, y ese sonido me llena de paz.

No me gusta ir a casa de nadie, aunque podría haberlo hecho. Prefiero estar a mi aire, disfrutar del día con mis amistades, desayunar, comer, reír, pasear… y luego, al caer la noche, volver a este rincón tranquilo donde solo estamos Coco, el mar y yo.

Hoy ha sido un día maravilloso. El sol ha brillado con fuerza, y hemos paseado por el paseo marítimo. Coco ha jugado feliz con otros perritos que nos hemos encontrado por el camino.
Y ahora, mientras escribo esto y oigo las olas romper suavemente, solo puedo dar gracias a la vida, al universo, a Dios, por este día tan bonito que nos ha regalado.

Gracias, gracias, gracias.





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Primera noche junto al mar

He vuelto a un pequeño pueblo de la costa, un lugar que guarda una parte de mi vida. Aquí viví un tiempo, y todavía tengo buenas amistades ...